Hay productos que utilizamos en nuestra rutina diaria sin saber el daño que le están haciendo a nuestro cuerpo. En los últimos años hemos escuchado muchas veces sobre los alimentos y cosméticos cancerígenos, pero nos rehusamos a poner atención a lo que consumimos. A continuación, te presentamos una lista con los 10 productos más cancerígenos. ¡Pon mucha atención!
1. Edulcorantes artificiales.
Los edulcorantes artificiales como el aspartamo y la sucralosa (Splenda) engañan a tu cuerpo para almacenar grasa y aumentan el riesgo de diabetes. Deberías eliminar estos productos de tu dieta para llevar una vida más sana.
2. Envases y botellas de plástico.
Redicir los alimentos en envases de plástico es un paso básico para reducir tu exposición a sustancias químicas que alteran la función endocrina, como bisfenol A (BPA) y bisfenol-S (BPS). El sistema endocrino influye la regulación del estado de ánimo, el crecimiento y el desarrollo, la función de los tejidos, el metabolismo, así como la función sexual y los procesos reproductivos.
3. Utensilios de cocina antiadherentes.
Sustituye las ollas y las cacerolas antiadherentes por los utensilios de cocina de cerámica o de cristal. El revestimiento antiadherente se fabrica con un producto químico llamado ácido perfluorooctanoico (PFOA), que ha sido etiquetado como un cancerígeno “probable”.
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4. Ambientadores.
Los desodorantes de las habitaciones contienen frecuentemente 2, 5-diclorofenol, un metabolito del 1,4-diclorobenceno, que se ha relacionado con la pubertad precoz y otros problemas de salud, incluyendo el cáncer. Los ftalatos endocrinos también se encuentran comúnmente en los ambientadores y desodorantes en la habitación.
5. Jabones y detergentes antibacteriales.
La desinfección del cuerpo y el entorno puede causar mucho daño a largo plazo. No sólo promueve el desarrollo de bacterias resistentes a los fármacos, sino que los compuestos antibacteriales, como el triclosán, también se han relacionado con varios efectos nocivos para la salud, especialmente en niños pequeños.
6. Productos de limpieza comerciales.
Puedes evitar bastantes productos químicos peligrosos simplemente reemplazándolos con una breve lista de ingredientes básicos. Puedes hacer tus propios productos naturales y evitar perjudicar la salud de tu familia.
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7. Productos de cuidado personal.
Los productos químicos se absorben muy rápido a través de la piel. Esto aplica sobre todo para las mujeres, quienes utilizan muchos cosméticos en su rutina de belleza. El maquillaje también puede ser una fuente oculta de metales pesados.
8. Especias caducadas.
Las hierbas y especias son muy beneficiosas para la salud y varios estudios lo confirman. Sin embargo, si las especias no están frescas pueden contaminar tu comida.
9. Dispositivos electrónicos.
Tenemos que reconocer que no nos desharemos de nuestros teléfonos inteligentes o computadoras, pero sería prudente reconsiderar cómo utilizamos los dispositivos. Algunos niños, especialmente los adolescentes, tienden a estar rodeados de múltiples aparatos electrónicos durante muchas horas. El daño a largo plazo y la radiación inalámbrica es muy fuerte, lo cual requiere un enfoque prudente.
10. Tu silla.
Investigaciones recientes revelan claramente que tu silla puede ser realmente uno de los artículos más peligrosos para la salud. Se ha demostrado en repetidas ocasiones que las sesiones prolongadas son un factor de riesgo para enfermedades crónicas y envejecimiento prematuro, incluso si te ejercitas regularmente y estás en forma. El ejercicio no puede deshacer el daño causado por horas en la silla, ni por fumar.