Las vitaminas son esenciales para que el cuerpo humano funcione
correctamente y realice acciones vitales para la salud, como la absorción de
los nutrientes, formación de células sanguíneas y transformación de
alimentos en energía.
Existen muchos tipos de vitaminas y algunas de las más importantes se
concentran en el grupo de vitaminas B, donde se halla el
ácido fólico, la tiamina, la biotina y la niacina, entre otras.
¿Para qué sirve la Vitamina B17?
La vitamina B17, también conocida con el nombre de amigdalina o
Laetril, es un glucósido que se deriva del aminoácido
fenilalanina y se encuentra de forma natural en las semillas de
albaricoque. En la actualidad son muchos los expertos en medicina que aseguran
que esta sustancia no es una vitamina y, por lo tanto, no debe incluirse dentro
del grupo del complejo B.
No obstante, otros galenos y adeptos a la medicina alternativa aseguran que
la vitamina B17 es un potente remedio para el cáncer. En eSalud
te explicamos a continuación qué es la vitamina B17, dónde se encuentra y qué
tan peligroso puede ser su consumo en grandes cantidades.
Qué es la vitamina B17
La vitamina B17 es un glucósido cianogénico que se deriva
del aminoácido fenilalanina y fue descubierto en 1950 por el doctor Ernst T.
Krebs, médico que también patentó la versión sintética de la
amigdalina b17, mejor conocida como Laetril. Si bien no se considera
una vitamina, esta sustancia aporta gran cantidad de minerales al cuerpo humano
y actúa en una serie de procesos importantes para la salud, como el metabolismo
de las proteínas.
La vitamina B17 es también considerada una sustancia muy peligrosa en
altas dosis, ya que cuando la amigdalina se descompone libera cianuro,
lo cual puede causar una importante intoxicación que lleva a la muerte. Debido a
este efecto tóxico que la vitamina B17 puede causar en el
organismo, su consumo como medicamento o suplemento está prohibido en muchos
países.
Además, es importante tener en cuenta que las vitaminas son sustancias
esenciales para el organismo y la amigdalina no es considerada una de ellas.
Propiedades de la vitamina B17
A pesar de la polémica que hay en torno a esta sustancias, sí es cierto que
la amigdalina ofrecer una que otras propiedades que hacen que la ortomedicina la
considere una vitamina. No obstante, los beneficios que se pudieran obtener de
este glucósido se pueden conseguir a través del consumo de las vitaminas del
complejo B.
¿Por qué la ortomedicina considera que la amigdalina es una vitamina?
Porque es una sustancia que interviene en el proceso de metabolizar nutrientes
y, además, es hidrosoluble, como lo son muchas de las vitaminas.
Funciones de la Vitamina
B17 en el organismo
Interviene en la formación del ácido fólico: la
amigdalina interviene en el proceso de formación de la vitamina B9, mejor
conocida como ácido fólico, sustancia que ayuda en el proceso de
formación de tejidos, interviene en la descomposición y creación de
proteínas y ayuda a la formación de glóbulos rojos y producción de ADN.
Metaboliza nutrientes: la amigdalina interviene en el
proceso de metabolización de nutrientes para ayudar al cuerpo a descomponer
las proteínas que los mismos contienen.
Favorece la piel: la vitamina B17 forma parte de las sustancias que
mantienen la piel y demás tejidos del organismo
saludables y en buen estado.
Beneficios de la amigdalina
o vitamina B17
Debido a las propiedades mencionadas anteriormente, la vitamina B17 ofrece
beneficios al organismo por dentro y por fuera, los más resaltantes son los
siguientes:
Gracias a su acción en la formación y conservación de los
tejidos, la amigdalina permite que la piel conserve un aspecto más
joven, pues retarda el envejecimiento y la aparición de las líneas de
expresión.
La vitamina B17 ayuda a que el cabello se mantenga elástico
y conserve por mucho más tiempo su tono natural.
Reduce el dolor de heridas tópicas como el causado por
quemaduras.
Su acción de estimular la formación de ácido fólico fortalece la
memoria, sobre todo en personas de edad avanzada.
Ahora bien, dado el grado de toxicidad de esta sustancia, es
preferible obtener sus beneficios a través de otros suplementos o
vitaminas saludables y esenciales, por ejemplo, la biotina es
responsable del crecimiento y resistencia del cabello, la vitamina C y su acción
antioxidantes son el mejor remedio para envejecimiento de la piel, el dolor de
quemaduras puede tratarse con analgésicos y la memoria puede fortalecerse con
ejercicios de agilidad mental.
No es necesario consumir amigdalina para que
nuestro cuerpo funcione correctamente, como hemos mencionado a lo largo del
artículo, esta sustancia no es esencial para la salud del cuerpo humano.
¿Dónde se encuentra la vitamina
B17?
La presencia de amigdalina se encuentra mayormente en los
alimentos de origen vegetal, al contrario de la mayoría de
vitaminas del complejo B, que podemos obtenerlas a través del consumo de carnes
de origen animal como el hígado de ternera. Los siguientes alimentos contienen
gran cantidad de amigdalina en su composición:
Alimentos con Vitaminas b17
Frutos secos como las nuce es y almendras.
Frutas como el albaricoque, mora, arándanos, cerezas, fresas y
frambuesas.
Garbanzos y lentejas.
Brotes de bambú.
Cebada, avena y arroz integral.
Llevar una alimentación exclusiva con alimentos ricos en amigdalina no es
aconsejable, el cuerpo humano necesita de otros nutrientes, que sí son
esenciales, para mantenerse saludable. Lo ideal es que la dieta diaria esté
conformada por tres comidas compuestas por carbohidratos, vegetales
y proteína animalmás tres meriendas que pueden ser frutas o
frutos secos.
Por el contrario de lo que se piensa, prescindir del consumo de algún grupo
alimenticio puede afectar a nutrición correcta del ser humano, lo correcto es
mantener una ingesta equilibrada de alimentos en porciones justas, no excesivas.
La vitamina B17 y el cáncer
La aparición de la versión sintética de la amigdalina,
conocida como Laetril, fue considerada por muchos
expertos en medicina como un excelente remedio para curar el cáncer. A raíz de
esto, fueron muchos los pacientes con dicha enfermedad que se trataron con
Laetril en los años 60, sin embargo, el resultado no fue el esperado.
La administración de en grandes cantidades de amigdalina demostró, en un
estudio realizado por Clínica Mayo, que ninguno de los pacientes
respondió de forma positiva al tratamiento con Laetril e,
incluso, algunos murieron por intoxicación por cianuro.
En la actualidad, muchos adeptos a la medicina natural aseguran que
la vitamina B17 sí puede curar el cáncer, sin embargo, dicha premisa ha
quedado desmentida en múltiples casos de paciente con cáncer que, además de no
sobrevivir a la enfermedad, se enfrentaron a una importante intoxicación
con cianuro.
De hecho, a raíz de tantos casos de intoxicaciones han sido mucho los países
que han prohibido el tratamiento de enfermedades con esta
sustancia.
Dicho esto, en eSalud queremos resaltar nuevamente que se ha
comprobado que esta sustancia no es esencial para la salud del cuerpo
humano y que, por lo tanto, no existe la necesidad de su consumo como suplemento
o tratamiento médico.
Asimismo, destacamos que este artículo es meramente informativo
y que, debido a sus efectos mortales para la salud, la administración de
amigdalina como suplemento o tratamiento medicinal queda al juicio del médico
tratante de cada paciente y merece, por mucho, la consulta de una segunda
opinión médica.
La gran mentira
de la vitamina B17: el peligroso remedio que promete curar el cáncer
Uno de los principales riesgos es que una
vez consumida, esta 'vitamina' puede transformarse en cianuro dañino para
nuestro organismo.
Cada cierto
tiempo, aparece por las redes una sustancia llamada vitamina B17. Por lo
general, resaltando su capacidad para curar el cáncer. Sin embargo, bajo
esta denominación se esconde en realidad un medicamento llamado
Laetrile, una forma artificial de la amigdalina que se encuentra de
forma natural en algunos alimentos, como las nueces crudas, como las
almendras amargas o los huesos de algunas frutas como el albaricoque, aunque
en niveles muy bajos.
Según algunas de
estas historias recurrentes, el cáncer sólo sería más que el
resultado de la deficiencia de vitamina B17. "El objetivo con este
artículo es convencerte que no hay ninguna enfermedad tal como lo es el
cáncer, puesto que es solo una deficiencia de vitamina B17 (Amygdalin). Así
que presta mucha atención acerca de esta teoría del cáncer que no ha sido
dada a luz por completo, te sorprenderás"Todo ello, sin ahorrar críticas a
gobiernos y farmacéuticas, a los que acusa de esconder esta información en
pos de espurios intereses económicos y políticos: "Resulta que para la
industria el cáncer es un negocio que vale miles y miles de millones de
dólares estadounidenses. Pero, a pesar que la cura del cáncer existe desde
hace mucho tiempo, no se ha dado a conocer por la sencilla razón que llena
los bolsillos de las industrias farmacéuticas”. Unas afirmaciones que se
basan en el libro Un mundo sin cáncer: la historia de la vitamina B17
de G. Edward Griffin, que, en definitiva, no son más que un refrito
de teorías conspirativas y de defensa de las terapias pseudocientíficas.
Sin embargo, y a pesar de los supuestos testimonios que afirman haber
superado el cáncer con esta sustancia, lo cierto es que no existe
evidencia científica de su eficacia. Es más, en su contra hay
numerosos estudios que lo vinculan con efectos secundarios potencialmente
graves. De hecho, las entidades reguladoras de medicamentos en Estados
Unidos, Canadá y la Unión Europea advierten sobre los riesgos de someterse a
ellos, sobre todo por su relación con el cianuro
Historia de una hipótesis
En 1920, Ernst
T. Krebs padre formuló la
teoría de que la amigdalina podría ser eficaz contra el cáncer.
Una posible eficacia que se veía reducida por la toxicidad que representaba
para los humanos. Su hijo, Ernst T. Krebs Junior, continuó sus
investigaciones. En 1952 pudo sintetizar una versión menos dañina llamada
Laetrile. A pesar de no ser una vitamina, la denominó vitamina B17,
probablemente para evitar las regulaciones de la Administración de
Medicamentos y Alimentos (FDA), que se aplican a los medicamentos, pero no a
las vitaminas.
A pesar de estos
intentos por esquivar la supervisión, la
FDA emitió una declaración contra el Laetrile en 1977. En ella, señalaba
la inexistencia de evidencias científicas para respaldar su eficacia y
seguridad. Finalmente, la FDA acabó declarando ilegal los
tratamientos de amigdalina contra el cáncer en 1987.
La mayor parte
de la investigación sobre la vitamina B17 se centra en sus
asociaciones con el cáncer, como hemos visto con pingües
resultados. Sin embargo, hay quienes defienden posibles beneficios para la
salud en otras áreas.
Un
estudio en personas entre 40 y 65 años encontró que la amigdalina ayudó
a reducir la
presión arterial sistólica en un 28,5% y la presión arterial diastólica
en un 25%. Sin embargo, este fue un estudio de muy baja calidad que
no utilizó un grupo de control.
Otras
investigaciones en ratas indican que la amigdalina puede ayudar
a aliviar el dolor. No obstante, hay una falta de evidencia basada
en humanos que sugiera la efectividad de la amigdalina como analgésico.
Otro
estudio de 2020 sugiere que la vitamina B17 puede ayudar a
aumentar la inmunidad. A pesar de ello, la investigación también
destaca la falta de evidencia para respaldar esto y que se necesita más
investigación.
En definitiva,
todas estas afirmaciones se basan en estudios previos en los que no
existe, por ahora, ningún resultado concluyente.
¿Cuáles son los riesgos?
Como hemos
señalado antes, existen más evidencias de sus riesgos y efectos secundarios
que de sus beneficios. Si una persona ingiere vitamina B17, el
cuerpo la convierte en cianuro en el intestino delgado. Por
ejemplo, un compuesto por vía oral de 500 miligramos de amigdalina puede
suponer hasta 30 miligramos de cianuro. El problema es que esta sustancia es
tóxica y puede ser mortal. Se estima que una dosis letal mínima de cianuro
es de aproximadamente 50 miligramos o 0,5 miligramos por kilogramo de peso
corporal.
Además, otras
evidencias apuntan a que la amigdalina oral es aproximadamente 40 veces más
potente que la forma intravenosa debido a la forma en que puede convertirse
en cianuro en el tracto gastrointestinal. Además de la muerte en los casos
más extremos, una intoxicación por cianuro de leve a moderada puede
causar varios síntomas como dolor de cabeza, náusea, aumento de la
frecuencia respiratoria, irritación de ojos y piel, mareo, coloración azul
en la piel, labios, encías o alrededor de los ojos debido a la falta de
oxígeno en la sangre o daño hepático.
Vitaminas PROCESOS PARA SU BENEFICIO
Así rejuvenecen tu rostro las
infiltraciones de vitaminas: todo lo que debes saber
Los beneficios para la dermis de la cara son notorios. Las
vitaminas que suelen usarse en estas inyecciones son la vitamina
C y E.
La vitamina que cuida tu cerebro y
recomienda Harvard: en qué alimentos encontrarla en España
vitaminas del grupo B"
Todas las vitaminas del grupo B aportan beneficios para un
correcto funcionamiento de este órgano y para prevenir
enfermedades neurológicas.
El cerebro es uno de los órganos más importantes del cuerpo, ya
que es el encargado de gestionar todas las funciones vitales del
organismo. Sin embargo, no es inmune al paso del tiempo y, al
igual que al resto del cuerpo, la dieta y los hábitos de
vida le afectan, pudiendo deteriorarlo antes de tiempo.
"El grupo de vitaminas que más priorizo para mantener mi cerebro
joven y saludable son las vitaminas del grupo B",
revela Uma Naidoo, psiquiatra nutricional de la Escuela de
Medicina de la Universidad de Harvard (EEUU) y autora de
This is your brain on food (Lo que la comida le hace a tu
cerebro), en declaraciones a la BBC. La clave para mantener un
cerebro en forma es tratar de frenar o ralentizar el
deterioro cognitivo y, para ello, la vitamina B parece
tener un papel relevante.Como revelan algunos
estudios, a medida que se envejece, las probabilidades de
sufrir una enfermedad neurológica aumentan. Por
eso, la mejor arma es la prevención y tratar de ralentizar un
proceso que, inevitablemente, es natural.
"Existen 13 vitaminas esenciales para el
funcionamiento, el crecimiento y el desarrollo normales de las
células", señala José Gallardo, dietista-nutricionista. Estas se
encuentran en los alimentos que ingerimos cada día, estando en
proporciones distintas. Por eso, es tan importante mantener una
dieta equilibrada.
Ocho tipos
Según destaca Naidoo, la vitamina B cubre muchos aspectos
relacionados con la salud del cerebro, aunque insiste en señalar
que hay ocho tipos de vitamina B. Por un lado, está la
vitamina B1 o tiamina, que ayuda con las funciones
celulares básicas y el metabolismo para la obtención de energía.
Un nivel bajo de este tipo puede provocar una función
cognitiva deficiente. Además, según un
estudio, tiene una influencia positiva sobre la comunidad
microbiana intestinal.
La vitamina B2o riboflavina
funciona como asistente para las enzimas en las células
implicadas en distintas funciones del cerebro y del cuerpo en
general. También ayuda a descomponer la grasa, a producir
energía, a metabolizar los fármacos y previene el daño
de los vasos sanguíneos, según destaca una
investigación.
Mientras, la B3 o niacina, un antioxidante que
disminuye la inflamación corporal, está vinculada a más de 400
enzimas que producen elementos como la grasa de la que se
alimenta el cerebro, su principal combustible.
De hecho, también está
considerada como un neuroprotector y, en modelos
animales, se ha
asociado la reducción de la letalidad en los casos de la
exposición a la radiación.
El ácido pantoténico o vitamina B5 se asocia
con muchas de las reacciones químicas que tienen lugar en el
organismo vinculadas al sistema inmunológico y a la salud del
cerebro. De hecho, es una molécula clave en el mantenimiento y
creación de la mielina, la capa aislante de los
nervios de la médula espinal y del cerebro.
De la demencia a la depresión
La vitamina B6 o piridoxina destaca por su
labor en la prevención de enfermedades. La
razón es que los niveles adecuados de esta vitamina en el cuerpo
están asociados con un menor riesgo de varios tipos de cáncer,
como destaca una
investigación llevada a cabo por un grupo de científicos
australianos.
En el caso de la vitamina B7 o biotina, su
acción se ve reflejada en el correcto funcionamiento de los
neurotransmisores del cerebro. Recientemente también se han
realizado
ensayos en los que se la ha relacionado con una
mejoría en casos de depresión clínica.
El folato o vitamina B9 es un suplemento muy
popular que tiene un papel fundamental en la salud cerebral y
neurológica, protegiendo los neurotransmisores.
También está relacionada con otros beneficios, como la
protección de los pacientes con enfermedad inflamatoria
intestinal, la
reducción de la toxicidad del arsénico en niños y adultos e,
incluso, la
prevención y control de la diabetes tipo 2.
Por su parte, la vitamina B12 o cobalamina es
base en la formación del ADN y de glóbulos rojos, aunque también
está relacionada con el sistema nervioso, la función cerebral y
su desarrollo. También tiene otras funciones más específicas en
el cuerpo, como ayudar a descomponer la homocisteína y
que así no se acumule. Ésta es un tipo de proteína
dañina para el sistema cardiovascular que, además, está
relacionada con algunos tipos de demencia.
Dónde encontrarla
Ahora bien, todo esto, dónde se puede encontrar. Pues bien, a lo
largo del día es muy probable que consumas alimentos ricos en
vitamina B, ya que es una molécula que se encuentra de
forma abundante.
Hay alimentos que la tienen en una mayor concentración, por lo
que reforzar su consumo puede ser clave para mantener la salud
del cerebro en perfecto estado. Algunos de estos alimentos son
el yogur, que contiene B2 y B12; el
huevo, rico en B7; las legumbres, una
excelente fuente de B9, B1, B2, B3, B5 y B6; el salmón,
que contiene B2, B3, B6 y B12; las verduras de hojas
verdes, ricas en B9; y las semillas de girasol,
que pueden llegar a aportar hasta el 20% del valor diario
recomendado de B5.
Es una de las verduras menos populares en nuestra dieta, pero
quizás sabiendo sus muchas propiedades nos decidamos a
incorporarla. La 'superverdura' odiada España que tiene más vitamina C que la naranja y recomienda Harvard
Es una de las verduras menos populares en nuestra dieta, pero quizás sabiendo sus muchas propiedades nos decidamos a incorporarla.Pequeñas,
arrugadas, completamente verdes y con un olor nada agradable.
Las coles de Bruselas no son precisamente las
verduras más consumidas en España, pero nuestra animadversión
hacia ellas debería cambiar cuando antes si tenemos en cuenta
los nutrientes que nos aportan y las
recomendaciones específicas que formulan desde la Universidad de
Harvard. Con más vitamina C que las naranjas,
aportan además poderosos antioxidantes y algunos de sus
compuestos ayudan a inhibir las células cancerígenas.
De la misma familia de
crucíferas o brasicáceas a la que pertenecen el resto de
coles, la coliflor y el brócoli, las coles de Bruselas tienen
una gran cantidad de fibra que, según los investigadores,
"es buena para mantener felices a las bacterias en el
intestino". Aportan también minerales esenciales como
el potasio y el calcio, que velan por la salud de los músculos y
los huesos, además de vitaminas K y C para blindar el sistema
inmunológico y mantener huesos saludables.
Una bomba de antioxidantes
De hecho, afirman Bernuzzi y Traka que las coles de Bruselas
crudas tienen más vitamina C de la que pueden
aportarnos las naranjas. Incluso cocidas, que pierden
nutrientes, nos estarían aportando la misma cantidad de
esta vitamina que una naranja cruda o en zumo.
Siguiendo en la línea de los antioxidantes, esta verdura es rica
en una amplia gama de sustancias químicas naturales, como
carotenoides y polifenoles, además de los glucosinolatos, que
contienen azufre y son los responsables de su peculiar olor.
Todos ellos se han estudiado como potentes antioxidantes que
pueden promover la salud al prevenir el daño celular. De hecho,
consumir verduras como las coles de Bruselas y otras de su
familia se asocia con
un riesgo reducido de desarrollar una amplia gama de cánceres
y aunque la investigación continúa, los expertos aconsejan
no consumir menos de cinco porciones de estos alimentos
a la semana.
Estos compuestos sulfurosos amargos forman parte del sofisticado
sistema de defensa de las coles contra los herbívoros que se
conoce como complejo glucosinolato-mirosinasa o bomba de aceite
de mostaza. Se encargan de evitar que los insectos las piquen,
por ejemplo, pero también atraen a otros para
permitir la polinización. Hay unas 200 sustancias
diferentes que se encargan de esta tarea en las
brasicáceas.
Las coles de Bruselas gozan de una fama por encima de la media y
prueba de ello es que la profesora Teresa Fung,
adjunta del Departamento de Nutrición de Harvard, las ha
introducido en la lista de los
cinco alimentos que deberíamos
consumir a diario. Destaca beneficios como el
refuerzo del sistema inmunitario, la reducción del cansancio y
la mejora de la visión. Asimismo, reitera la importancia
de sus antioxidantes que previenen el daño celular y de
minerales que fortalecen huesos y músculos. 1.En
realidad, mejorar nuestra dieta no debería ser una tarea
complicada si sabemos elegir entre la enorme cantidad de
alimentos sanos de los que disponemos en el mercado. Es decir,
si basamos nuestra nuestra alimentación en frutas, verduras,
hortalizas, pescados o cereales integrales, y evitamos carnes
procesadas, alimentos con una elevada cantidad de azúcar como
los refrescos o los zumos y los ya mencionados ultraprocesados.
2 .Salmón
El salmón es uno de los pescados que, tras haber sido
demonizado en los años 70 por ser un alimento con un alto
contenido en grasa, vive actualmente una época dorada. "Este
pescado azul es rico no sólo en proteínas saludables, sino
también en ácidos grasos omega-3, que benefician tanto a su
corazón como a su cerebro", explican desde la Universidad de
Harvard. "También proporciona vitamina D para la formación de
huesos".
La institución avisa de que comer salmón a diario es una
"exageración" para la mayoría de las personas, por lo que
recomienda su ingesta al menos una vez a la semana con el
objetivo de obtener algunos de los beneficios que tiene para la
salud.
3 Coles de Bruselas
Pese a ser una de las verduras que peor fama tiene del
supermercado junto al brócoli, las coles de Bruselas son un
alimento especialmente rico en fibra. De hecho, se trata de la
segunda verdura que más fibra dietética aporta a nuestro
organismo tras las alcachofas (4,3 gramos por cada 100 de coles,
según la base de datos de composición de alimentos BEDCA).
Las coles de Bruselas son también ricas en micronutrientes
como la vitamina A, la vitamina C, la vitamina K, potasio y
ácido fólico. "Al igual que otras verduras crucíferas, las coles
de Bruselas contienen compuestos bioactivos, como los
antioxidantes, que son sustancias químicas que ayudan a prevenir
el daño celular dentro de su cuerpo", dice la Escuela de Salud
Pública de Harvard.
4 Arándanos
Los arándanos son una de las frutas que mejores propiedades
tienen. En los últimos tiempos distintos estudios científicos
han evidenciado sus bondades a la hora de reducir la presión
arterial, prevenir el alzhéimer, o luchar contra la infección de
orina. También es conocido su poder antiinflamatorio y su acción
antibacteriana.
"Estas pequeñas bayas de color oscuro son ricas en
antioxidantes, particularmente vitamina C. Con 56 calorías por
cada 100 gramos, también ofrecen una buena dosis de vitamina A y
fibra", explica Teresa Fung. La Universidad de Harvard apunta
que se pueden sustituir los arándanos por otras frutas de color
oscuro como las granadas o las cerezas si éstos no están de
temporada.
5 Frutos secos
Ya sean almendras, nueces, pistachos o avellanas, los frutos
secos deberían estar presentes en nuestro día a día por sus
numerosos beneficios para la salud. Tal y como hemos explicado
en alguna ocasión en este mismo periódico, se trata un alimento
que se asocia con un menor sobrepeso y obesidad, según han
demostrado distintos estudios científicos.
Además, se trata de alimentos ricos en grasas poliinsaturadas
como el ácido linoléico o linolénico, ambos esenciales para
nuestro organismo. También poseen un alto contenido en fibra,
por lo que aumentan nuestra sensación de saciedad, así como una
elevada cantidad de ácidos grasos monoinsaturados, que aumentan
los niveles de HDL o ‘colesterol bueno’. Eso sí, conviene
consumir frutos secos sin procesar, en su versión cruda, y no
fritos o rebozados en miel, tal y como se pueden encontrar en
algunas ocasiones.
6 Yogurt
El yogurt es uno de los alimentos que tradicionalmente ha
gozado de una mejor fama desde el punto de vista de la salud. Se
trata de un producto rico en proteínas, calcio, magnesio y
vitamina B12, así como algunos ácidos grasos clave para nuestro
organismo. Su consumo está relacionado con un menor sobrepeso y
obesidad. También ha sido relacionado con una mejor salud
gastrointestinal.
Sin embargo, tal y como avisa Fung, conviene llevar cuidado
porque muchos de los que encontramos en el supermercado tienen
un contenido demasiado elevado de azúcar, lo que acabaría
contrarrestando sus beneficios. Así, los mejores yogures que
podemos encontrar en los establecimientos son los naturales o
los griegos, tal y como explicamos en EL ESPAÑOL.
Cómo comer coles de Bruselas
Valora también que su contenido en fibra ayuda a regular el
tránsito intestinal y que los glucosinolatos ayudan a
inhibir la proliferación de células cancerígenas,
especialmente las que derivan en cáncer de mama, ovario,
estómago, vejiga o colon. Fung considera que las coles de
Bruselas, con un alto porcentaje de agua, son
grandes aliadas de las dietas de reducción de peso y
su consumo está recomendado para mujeres embarazas o que estén
buscando un embarazado por su aporte de ácido fólico.
Para aprovechar al máximo sus nutrientes, se aconseja que las
coles de Bruselas se consuman en temporada, como el resto de
frutas y verduras. En su caso, estaríamos hablando de los
meses comprendidos entre octubre y abril, pero
se pueden encontrar todo el año frescas y congeladas. Hay que
tener en cuenta que no debemos cocinarlas durante mucho tiempo,
porque habrá también una pérdida de propiedades por el calor, y
lo más interesante es que conserven su crujido.
Investigadores españoles han elaborado un suplemento a base de
vitaminas y minerales que protege la retina y ralentiza la
disfunción visual. ácido fólico, vitamina
B6, vitamina A, zinc, cobre y selenio
Un aliado para la absorción del hierro es la vitamina C. Para
facilitar esta tarea, debemos consumir alimentos como los
pimientos, las frutas cítricas...
La fatiga o cansancio acumulado, los cambios hormonales, el
estrés, la falta de hierro durante el ciclo menstrual… Descubre
cómo superar ese déficit de...