VIOLENCIA DOMESTICA
“Epidemia contra la Mujer y la Niñez”
Por: Evelyn Tosado-Quiñones, CCDr.
Comunicación y Consejería Superacional
E-mail: www.superacion@tosado.com
Usualmente, cuando utilizamos la palabra “EPIDEMIA”, nos referimos a una enfermedad o condición que afecta nuestra salud física, que ha alcanzado niveles incontrolables, de consecuencias devastadoras y que hay que atacar de inmediato por todos los flancos. No obstante, cuando un mal sicológico o social alcanza niveles en extremo “difíciles de controlar”, esto también se considera una “epidemia”, en términos sociales y de salud, quizás aún más incontrolable, ya que no sólo involucra a “la víctima” (o víctimas), sino también “al victimario” y a toda la sociedad. Todos los días, la prensa y demás medios de comunicación alrededor del mundo resaltan entre sus noticias principales, gran cantidad de casos de Violencia Doméstica. Si a esto le añadimos que la mayoría de los casos nunca llegan a la mesa de redacción de los distintos medios, realmente estamos hablando de un mal con alcance epidémico global.
A diario se observan alrededor del mundo aumentar los titulares como: “SIETE MILLONES Y MEDIO DE VICTIMAS POR VIOLENCIA DOMESTICA” -en la Unión Europea (UE)- (1 de cada 25 mujeres) -diario El País – España, Agosto 2000- Es decir, 1 de cada 25 mujeres, sin contar los niños y niñas, también víctimas. Y cada día llegan a nosotros noticias como la de que según un estudio realizado en Nueva Zelandia en 1994, se resalta que “el costo de la violencia en el hogar fue de 1.200 millones de dólares, cifra que superó los ingresos de ese país por concepto de exportaciones de lana, o a los recursos gastados en indemnizaciones por desempleo. Esta situación TIENE que ponernos a pensar en que es hora ya de que la Violencia Doméstica sea tipificada en todos los países del mundo, como un crimen de alto alcance, en un crimen no solo contra la mujer, sino contra toda la sociedad, ya que las víctimas son muchas, múltiples, variadas y el precio que estamos pagando es demasiado alto, siendo las víctimas directas las mujeres y los niños y niñas, o sea, las mujeres de hoy y los hombres y mujeres del futuro.
A principios del pasado año, el Sr. Nitin Desai, Secretario General Adjunto de las Naciones Unidas y Jefe del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU, se expresaba sobre el tema en una carta circular titulada “No se trata simplemente de un asunto de mujeres”:
“Una cuestión de importancia considerable es la epidemia de violencia basada en el género que ha generado el hombre…que ha confinado a la mujer al papel de subeditada y han llevado al hombre a creer que la violencia es aceptable para resolver los problemas a escala nacional, social y personal. …La violencia resulta costosa en todas las sociedades, y la violencia contra la mujer también tiene su costo en las vidas malogradas de las mujeres y los niños, y en la desintegración de las familias, lo que acarrea graves consecuencias para la sociedad en general. También tiene consecuencias presupuestarias: hay que encontrar recursos extrapresupuestarios para hacer frente a los costos adicionales derivados de los daños que ocasiona la violencia al sistema físico, mental y reproductivo de la mujer… Tenemos que eliminar todas las barreras que entorpecen la igualdad plena… y el logro de la igualdad de acceso de las mujeres y las niñas a la educación y los servicios apropiados de salud, especialmente la atención a la salud reproductiva…”
Es así como en el Preámbulo y los primeros 5 Artículos de la “Declaración Universal de los Derechos Humanos” encontramos apoyo a las antes mencionadas iniciativas (fragmentos):
Preámbulo:
-“Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la familia humana…que el desconocimiento y el menosprecio de los derechos humanos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad….“Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un regimen de Derecho…“La Asamblea General Proclama la presente Declaración Universal de Derechos Humanos…”
Art. 1. “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y dotados como están de razón y conciencia deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.”
Art. 2 “Toda persona tiene los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo… o cualquier otra condición…”
Art. 3 “Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona.”
Art. 4 “Nadie estará sometido a esclavitud ni servidumbre; la esclavitud y la trata de esclavos están prohibidas en todas sus formas.”
Art. 5 “Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes.”
Luego de leer el anterior fragmento de tan importante documento, y considerando datos de una reciente encuesta realizada por la Fundación Mujeres, de la Unión Europea, es interesante ver que la solución que los hombres encuestados ofrecen a esta “epidemia” se circunscribe a que los gobiernos tienen que atajar esta situación basándose en dos aspectos: “castigando a los agresores, sobre todo, pero también educando a la juventud y aplicando de forma estricta las leyes que ya existen”. Estas alternativas son las mismas que hubieran ofrecido, de seguro, los encuestados en el continente americano y, en su mayoría, el resto del mundo.
No obstante, en este preciso momento y a estas horas, no viene a mi mente otra pregunta que no sea: ¿Cuántos millares de mujeres, niños y niñas estarán siendo maltratados… en este preciso instante… por un hombre y padre agresor… y cuántos miles de ellos y ellas mañana no verán un nuevo amanecer, y… si lo ven, cuántos(as) vivirán un día más de angustia, sin saber qué les espera. Es por ello que, bien sea que tú conoces alguno de estos casos, o eres uno de esos agresores, o una de esas víctimas, por favor, no te quedes callado(a); busca ayuda de un profesional de la conducta humana, salud mental, o alguna entidad que ofrezca tales servicios.
¡Tú naciste para ser libre! A veces hasta de ti mismo(a).
¡Tú naciste para ser feliz! Busca ayuda.
Josefina Romaguera,MD, MPH
Catedrádica Departamento de Obstetricia y
Ginecología del
Recinto de Ciencias Médicas, San Juan,
Puerto Rico
La
menopausia es un evento natural que está asociado a
la disminución de las hormonas producidas por los ovarios (estrógeno y
progesterona). Este evento nos pasa a todas las mujeres y nos afecta a cada una
de manera individual y diferente. Está precedida por un período de
transición que comienza alrededor de los 40 años, el cual se caracteriza por
cambios hormonales. Suele estar asociado a cambios en el ciclo menstrual,
“calentones” y cambios urogenitales y
en la función sexual. Durante este período se han descrito cambios
psicológicos.
La menopausia
inducida se caracteriza por
una reducción súbita de las hormonas sexuales. Ya que existen alternativas
médicas y de medicina alterna para controlar y prevenir estos cambios, la
evaluación médica es esencial. Esta debe incluir un historial completo y una
evaluación de los síntomas y los riesgos, a corto y largo plazo, de cada persona individualemente y descartar otras
causas médicas tales como: problemas de tiroide o patología del sistema
reproductivo.
La enfermedad cardiovascular es la causa número uno de
muerte en las mujeres mayores de 45 años. Estilos
de vida saludables son
esenciales para la prevención de estas y
otras condiciones médicas. Existe evidencia científica que el uso del
reemplazo hormonal en pacientes postmenopáusicas ayuda a prevenir enfermedades
cardiovasculares hasta en un 50% de los casos.
La osteoporosis es frecuente en las mujeres
postmenopáusicas. Su prevención es esencial ya que sus consecuencias, las
fracturas, pueden incapacitar al paciente. Entre los factores de riesgo para
osteoporosis se encuentran: ser mujer, estar postmenopáusica, dieta baja en
calcio, uso de algunos medicamentos( ejemplo- esteroides), uso del cigarrillo y
del alcohol y falta de ejercicios. Existen medios diagnósticos para detectar
cambios tempranos en la densidad del hueso. Con un tratamiento adecuado se
puede prevenir la osteoporosis. El reemplazo hormonal es el tratamiento
más costo- efectivo para prevenir la osteoporosis en pacientes menopáusicas.
Existen otras alternativas como el alendronato, resinodrato, raloxifeno y
calcitonina. La medicina alterna puede ayudar en los síntomas de los “
calentones” pero no hay evidencia científica de que puede prevenir la
enfermedad cardíaca y la osteoporosis.
En el uso del reemplazo hormonal está asociado a mucho
mitos. El más mencionado es su relación con el cáncer del seno. Aunque existe
controversia, la mayor parte de la literatura científica coincide en que el
estrógeno no causa cáncer del seno. Se ha visto una
relación del reemplazo hormonal y el
cáncer del seno cuando se usa por períodos prolongados(usualmente más de 10- 15
años). El examen mensual del seno y la mamografía son esenciales
en el seguimiento de toda mujer. No
existe un aumento del cáncer de útero en pacientes que usan el reemplazo hormonal. El cáncer de colon
es frecuente en la mujer, se reporta menor incidencia en pacientes reemplazo
hormonal.
Los beneficios del reemplazo hormonal( prevención de
la enfermedad cardíaca y osteoporosis, posible relación a una disminución del
Alzheimer y cáncer del colon, entre otras) son más significativos que el
posible riesgo de desarrollar cáncer del seno.
Es importante enfatizar que toda mujer es única y sus necesidades médicas también lo son. Se recomienda un examen de rutina anual y discutir con su médico sus factores de riesgo, el estado físico y emocional para poder hacer un plan de manejo que garantice una menopausia saludable, sin limitaciones y con expectativas de una vida llena de opciones.
El equilibrio sexual
durante la menopausia
Por: Dra. Wanda Figueroa
Tel. (787) 759-6909
La menopausia es una nueva etapa en la vida de la mujer,
donde surgen unos cambios físicos, emocionales, fisiológicos, y de bienestar personal la cual toda mujer
pasa pero, cada mujer es única, y afecta de diversas maneras. El cambio en los niveles de hormonas determina esa época. El comienzo
del equilibrio sexual durante la
menopausia es sumamente importante para la pareja, pues como esta ocurre
naturalmente cerca de los 51 años, resta un largo camino de disfrute y
bienestar sexual.
La
mejor medida preventiva es informándose de esos cambios, reconocer esos cambios, consultar al profesional de salud las inquietudes tanto
de usted como la de su pareja. Conociendo lo que está pasando en el
cuerpo puede ayudarle a entender dichos cambios.
Los andrógenos son un grupo de
estructuras esteroides que normalmente funcionan para desarrollar las
características sexuales secundarias en la mujer. En la pubertad son los andrógenos los que causan el estímulo del
crecimiento del vello en la axila y en el monte pubis. La función mayor de los andrógenos es en el desarrollo de músculos y
huesos.
Los andrógenos adrenales son producidos
en la zona reticularias de las glándulas adrenales que se encuentran sobre los
riñones. El andrógeno es un producto
durante los cambios enzimáticos que ocurren desde la formación de colesterol
hasta finalizar la producción de costisol.
Los principales andrógenos en la
mujer y en el hombre son:
1.DHT- Dihidrotestosterona - es
el andrógeno más potente.
2.A’D
3.DHEA
4.DHEA sulfato
El deseo sexual en la mujer disminuye
entre los 40 y 50 años. Según un
estudio de la Universidad de Duke , se encontró que el 39% de las mujeres entre
las edades de 61-65 años estaban sexualmente activas, y un 27% entre las edades
de 66- 71 años.
Hay una relación débil entre los
niveles de testosterona y el libido (placer hacia la sexualidad) en las
mujeres. Se ha visto que mujeres con libido alto tienen bajos niveles de
testosterona y las que no tienen
libido, tienen niveles altos de
testosterona. Hay una creencia
equivocada de que la mujer en la menopausia que esté sufriendo depresión y tenga un bajo libido, se le “reemplaza”
con tratamiento de testosterona.
La eficacia y la seguridad de dicho tratameinto no ha sido establecida.
No se sabe el grado en que la menopausia
contribuye en los cambios de función sexual.
Los factores se clasifican
básicamente: debido a enfermedades, a las medicaciones y a enfermedades.
Las condiciones que causan que
haya una disminución en los niveles de andrógenos (testosterona) en la mujer
son los siguientes:
·
· El
remover ambos ovarios (el procedimiento quirúrgico se llama ooforectomía
bilateral) causa disminución en los niveles de testosterona en un 40 a 50%.
·
· La
terapia con corticoesteroides causa depleción de los andrógenos.
·
· Enfermedades
crónicas tales como el cáncer avanzado, anorexia nerviosa y quemaduras severas.
·
· Insuficiencia
adrenal / pituitaria.
A continuación los factores que afectan el equilibrio sexual saludable durante la menopausia:
Referencias:
Internet:
www.arhp.org-
salud reproductiva
www.asrm.com-
medicina reproductiva
Libros:
Primary
Care for Women, Phyllis C. Leppert, Fred M. Howard
Danforth’s
Obstetrics & Gynecology