Varices en miembros inferiores    Varices   catalogos 1  catalogos 2

Las venas de las extremidades inferiores son las responsables de que la sangre ascienda hasta el corazón, para lo cual disponen de un sistema de válvulas semilunares contrapuestas, que hacen que el flujo sanguíneo vaya en dirección ascendente y centrípeta del sistema venoso superficial (SVS) al sistema venoso profundo (SVP). Adicionalmente, para vencer la gravedad y hacer que la sangre suba, los músculos de la pierna comprimen las venas y generan un efecto de bomba.Las varices son dilataciones, alargamientos y flexuosidades de las venas del SVS de las extre- midades inferiores. La pérdida de flexibilidad de las paredes venosas y el deterioro funcional del sistema valvular dificultan el retorno venoso y favorecen el paso de sangre desde el SVP al SVS, ocasionando un aumento de la presión hidrodinámica en este último, con la posterior aparición de las varices. Las venas debajo de la piel se tornan gruesas y abultadas.Las varices son consideradas la cara visible de la insuficiencia venosa crónica (IVC), la cual ocu- rre cuando las varices no son capaces de devolver al corazón toda la sangre que llega a las piernas. Sin embargo, no hay una relación directa entre el tamaño de las varices y el grado de insuficiencia venosa.

Las varices y la IVC de los miembros inferiores son trastornos de relevancia clínica y frecuentes (se estima que cerca del 20% de los hombres y el 30% de mujeres lo padecen) que se manifiestan con uno o varios de los siguientes signos o síntomas: problemas estéticos, pesadez y edemas de las piernas, sensación de distensión, picor y dolor local sobre las varices, cansancio, calambres musculares, parestesias nocturnas y debilidad. La gravedad de los síntomas no se corresponde con el tamaño o extensión de las varices, ni con el volumen de reflujo. Adicionalmente, muchos de estos síntomas se hallan presentes en personas sin patología venosa.

Las complicaciones de la enfermedad incluyen inflamación crónica de las venas afectadas (flebitis), ulceración de las venas, y ruptura de las varices.

CAUSAS MÁS FRECUENTES DE VARICES

- Edad: El riesgo aumenta con la edad.

- Ortostatismo prolongado (estar en posición de pie largo tiempo)

- Inmovilidad.

- Gestación: Por el aumento de la presión abdominal.

- Paridad: Dos o más embarazos.

- Obesidad: Solo para mujeres

- Cambios hormonales.

- Calor.

- Antecedentes de trombosis venosa profunda o de traumatismos en miembros inferiores.

PACIENTES CON VARICES QUE DEBEN DERIVARSE AL MÉDICO

- Persistencia de las molestias a pesar de seguir las recomendaciones pertinentes.

- Presencia de varices secundarias, que aparecen tras un cuadro de flebitis o de una trombosis venosa.

- Presencia de inflamación y/o dolor importante en la zona de las varices.

- Presencia de dolor en la pantorrilla, con hinchazón de la pierna y aumento del tamaño de las venas.

- Cambio de color o de aspecto de la piel de las piernas.

- Presencia de úlceras, heridas o de sangrado por las varices.

- Posible asociación con la utilización de tratamientos hormonales sustitutivos o de an- ticonceptivos orales

RECOMENDACIONES PARA EL TRATAMIENTO DE LAS VARICES

Los objetivos de la intervención son: Reducir los síntomas, mejorar la apariencia, y prevenir la recurrencia y complicaciones. El tratamiento recomendado para mejorar la clínica relacionada con las varices y evitar complicaciones, se basa en educación sanitaria y la aplicación de las si- guientes medidas higiénico-dietéticas.

 

Tratamiento no farmacológico

Tratamiento farmacológico

que avalen su uso.

Cómo curar las varices con aceite de oliva

Las varices, o también conocidas como venas varicosas, es un afección que afecta especialmente a las mujeres y que consiste en una excesiva acumulación sanguínea, la cual suele darse por una debilidad en los conductos o paredes de las venas superficiales. Como consecuencia, la venas se dilatan y adquieren un aspecto morado, inflamado y retorcido por lo que pueden verse a simple vista en las piernas, donde son más frecuentes, aunque también pueden aparecer en otras zonas del cuerpo.

Esta afección, además de ser poco estética, puede traer otros síntomas bastante molestos como hinchazón, pesadez y calambres en la piernas y puede llegar a ser grave. Por ello, es importante que busquemos un tratamiento para eliminarlas y prevenir que vuelvan a aparecer. Uno de los mejores remedios para reducir las venas varicosas es el aceite de oliva, ya que cuenta con excelentes propiedades para mejorar tanto el aspecto de las venas como su circulación sanguínea. Es por ello que en el siguiente artículo de unCOMO te explicamos cómo curar las varices con aceite de oliva

Propiedades del aceite de oliva para curar las varices

El aceite de oliva es un líquido que se extrae de estas mediante el prensado y otros procedimientos. Aunque es un producto pensado para ser el condimento de diferentes comidas, el aceite de oliva es un poderoso remedio natural para tratar diversas afecciones y problemas de salud, entre ellos, la aparición de varices en las piernas. Todo ello, se debe a las diferentes propiedades del aceite de oliva para la piel y la circulación sanguínea: